La relación sexual
constituye un intercambio de energía muy fuerte entre los seres humanos, porque
implica la información hormonal de las dos personas y la transferencia lumínica entre ellas; de allí se forma una “memoria energética celular común” que
permanecerá con ambos miembros de la pareja aun cuando las dos personas ya no
estén en contacto.
En algunos casos de
psicología clínica de pareja se ha comprobado la necesidad de cerrar los ciclos
emocionales con parejas del pasado para erradicar miedos y traumas de
relaciones anteriores que estén interviniendo en las relaciones emocionales
presentes del paciente.
Desde el punto de vista
energético también es recomendable hacer una “limpieza y liberación” de la
energía que conserva el paciente de sus relaciones pasadas y activar la energía presente para potencializar todas sus habilidades al relacionarse no sólo en el
aspecto sexual, sino también a nivel social.
Materiales
Una vela blanca
Música relajante
Sal marina (se consigue
donde venden velas y esencias)
Aceite corporal (de
coco, de almendras, de lavanda, de lo que Ud. Prefiera)
Miel pura de abejas
Procedimiento
En el cuarto de baño
encender la vela blanca y ambientar con música relajante, hacer una mezcla
gruesa con la sal marina y el aceite, aplicar esta mezcla en todo el cuerpo
(del cuello a los pies), con especial énfasis en las áreas genitales, imaginar
que sale lodo/barro de tu piel, que estas limpiando todo tu cuerpo y mientras
tanto traer mentalmente a la persona de la que quieres limpiarte la energía (una persona por vez),
agradecerle por todos los momentos vividos, por todas las lecciones aprendidas
y entregarle su energía pidiéndole a cambio tu energía (con la que esa persona
se haya quedado), liberándole energéticamente para siempre.
En este tipo de rituales LO MAS
IMPORTANTE ES LA INTENCIÓN MENTAL, ya que estamos trabajando a nivel
energético.
Enseguida respiras y
haces una breve meditación o reflexión, luego te enjuagas la mezcla de sal y
aceite y procedes a aplicar mucha miel en tu cuerpo, agradeces a las abejas y
al sol por su trabajo energético para construir esa miel e imaginas cómo se
ilumina todo tu cuerpo, de manera que eres un ser de luz resplandeciente, listo
para recibir y dar amor en todas tus relaciones. Haces otra breve reflexión de
agradecimiento por tus bendiciones y de petición de aquello que deseas para tu
vida.
Enjuagas tu cuerpo con
agua y jabón y listo. Puedes ahora apagar la vela y la música.
Recuerda tener
precaución con la vela para evitar accidentes.
Para cada ex-pareja sexual se debe hacer este mismo ritual por separado, de manera que las cantidades de sal, aceite y miel las deberás determinar tu mism@.
No necesitas creer específicamente
en nada, ni siquiera en la energía; pues de todas formas esta limpieza te
dejará relajad@ y con la piel renovada y luminosa gracias a la exfoliación profunda!
Bendiciones en todas
tus relaciones.